¡Oh Señor! Haz de estos niños plantas excelentes. Permite que crezcan y se desarrollen en el Jardín de Tu Alianza, y otórgales lozanía y belleza mediante las efusiones de las nubes del Reino de Abhá.
¡Oh Dios bondadoso! Soy una criatura pequeña, enaltéceme admitiéndome en el reino. Soy terrenal, hazme celestial; pertenezco al mundo inferior, deja que pertenezca al reino superior; estoy apagado, haz que me vuelva radiante; soy material, hazme espiritual, y permite que pueda manifestar Tus infinitas bondades.
Tú eres el Poderoso, el Más Amoroso.